¡Muy buenas!
Hoy quiero escribir a raíz de una anédota que me ha pasado: a mi hija le ha picado una avispa ¡4 veces! Y el caso es que a raíz de ello he visto que hay mucha gente que no diferencia entre avispas y abejas, algo bastante interesante por motivos que luego, más abajo, os explicaré.
Las avispas, las abejas, y las hormigas son "parientes": los tres son insectos del orden Hymenoptera , aunque luego se dividen en ápidos (las abejas), véspidos (avispas) y formícidos (hormigas). Es decir, todas tienen el mismo origen pero han ido evolucionando en diferentes especies, de las cuales hoy hablaremos de las 2 primeras: avispas y abejas.
Pondré una comparativa entre una y otra para aprender a diferenciarlas:
A ambas especies les atraen lo mismo: colores vivos, olores fuertes, agua estancada, alimentos no cubiertos, cubos de basura abiertos... Es, por tanto, en estos sitios donde podemos sufrir una picadura con mayor probabilidad.
Hay una diferencia muy grande respecto a la forma de picar de uno y de otro: la avispa puede tanto picar como morder con sus mandíbulas. En el caso de que pique con el aguijón, aclarar que sería una hembra, puesto que los machos no tienen aguijón. ¿Por qué? Porque el aguijón no deja de ser un oviscapto (órgano que tienen algunos insectos y con el que ponen los huevos) transformado en aguijón. Los machos, por tanto, sólo muerden.
Las abejas son diferentes: no muerden, sólo pican con el aguijón, pero tienen la desgracia para ellas y la suerte para nosotros que una vez clavado y al volar de nuevo arrastran con él los intestinos del insecto provocando que acabe muriendo. Así pues una abeja sólo picará una vez en toda su vida, mientras que las avispas pueden hacerlo varias veces.
La picadura de estos insectos es especialmente dolorosa. Ya no sólo por la picadura en sí (o mordedura en el caso de las avispas, como hemos visto, y que puede doler en la misma intensidad que una picadura), si no por el veneno que inyectan. Este veneno puede ocasionar en algunas personas reacciones alérgicas importantes, hasta el punto que en el peor de los casos puede desembocar en un shock anafiláctico (reacción alérgica extrema que afecte al sistema respiratorio y circulatorio) y que incluso pueda suponer un fatal desenlace. Así pues es importante estar atento a la reacción de la persona que ha sido picada observando si en los próximos minutos tiene nauseas, malestar general, problemas para respirar o labios hinchados. En el caso de estos síntomas hay que llamar rápidamente al 112 para controlar la reacción, aunque estamos hablando de un porcentaje mínimo de personas a las cuales les pueda afectar de esta manera: El año pasado murieron por este motivo 10 personas en toda España, lo que no supone un número especialmente alarmante.
Hay que tener en cuenta también que hay personas que desarrollan esta alergia grave al cabo de varias picaduras y no reaccionan así con la primera, si no que a veces necesitan hasta 50 picadas posteriores para manifestarla.
Frente a una picadura habréis oído numerosos tratamientos (muchos de ellos "naturales") tales como ajo, o barro con saliva, si bien sobretodo la última no es nada recomendable realmente porque puede acabar en una infección de la herida.
Lo mejor que se puede hacer es primero quitar el aguijón en el caso de que siga clavado y posteriormente aplicarle un poquito de amoniaco o, si no se tiene a mano (que es lo normal), aplicar calor en la zona afectada para destruir cuanto antes las proteínas del veneno y así desnaturalizarlo rápidamente. Una piedra caliente, por ejemplo, nos serviría para ello. Una vez hecho, entonces sí que será recomendable aplicar frío para calmar el dolor de la zona.
En núcleo urbano se puede acudir a una farmacia cercana para que nos den algún tratamiento frente a picaduras.
Como curiosidad, comentaros también que aunque no lo parezca hay varios tipos de avispas y que se pueden diferenciar dependiendo de los colores de la cabeza y del torax y de las franjas negras y amarillas del abdomen. Os pongo una lámina de la web www.biodiversidadvirtual.com en la que veréis perfectamente estas diferencias entre especies.
Si queréis descargaros en grande la lámina podéis hacerlo aquí .
¡Espero que os haya gustado la entrada de hoy! Recordaros que podéis seguirnos en el grupo de Facebook "Entre pinos y sembrados" o a través de la cuenta de Twitter @pinosysembrados.
¡Hasta el Domingo!
Hoy quiero escribir a raíz de una anédota que me ha pasado: a mi hija le ha picado una avispa ¡4 veces! Y el caso es que a raíz de ello he visto que hay mucha gente que no diferencia entre avispas y abejas, algo bastante interesante por motivos que luego, más abajo, os explicaré.
Las avispas, las abejas, y las hormigas son "parientes": los tres son insectos del orden Hymenoptera , aunque luego se dividen en ápidos (las abejas), véspidos (avispas) y formícidos (hormigas). Es decir, todas tienen el mismo origen pero han ido evolucionando en diferentes especies, de las cuales hoy hablaremos de las 2 primeras: avispas y abejas.
Pondré una comparativa entre una y otra para aprender a diferenciarlas:
A ambas especies les atraen lo mismo: colores vivos, olores fuertes, agua estancada, alimentos no cubiertos, cubos de basura abiertos... Es, por tanto, en estos sitios donde podemos sufrir una picadura con mayor probabilidad.
Hay una diferencia muy grande respecto a la forma de picar de uno y de otro: la avispa puede tanto picar como morder con sus mandíbulas. En el caso de que pique con el aguijón, aclarar que sería una hembra, puesto que los machos no tienen aguijón. ¿Por qué? Porque el aguijón no deja de ser un oviscapto (órgano que tienen algunos insectos y con el que ponen los huevos) transformado en aguijón. Los machos, por tanto, sólo muerden.
Las abejas son diferentes: no muerden, sólo pican con el aguijón, pero tienen la desgracia para ellas y la suerte para nosotros que una vez clavado y al volar de nuevo arrastran con él los intestinos del insecto provocando que acabe muriendo. Así pues una abeja sólo picará una vez en toda su vida, mientras que las avispas pueden hacerlo varias veces.
La picadura de estos insectos es especialmente dolorosa. Ya no sólo por la picadura en sí (o mordedura en el caso de las avispas, como hemos visto, y que puede doler en la misma intensidad que una picadura), si no por el veneno que inyectan. Este veneno puede ocasionar en algunas personas reacciones alérgicas importantes, hasta el punto que en el peor de los casos puede desembocar en un shock anafiláctico (reacción alérgica extrema que afecte al sistema respiratorio y circulatorio) y que incluso pueda suponer un fatal desenlace. Así pues es importante estar atento a la reacción de la persona que ha sido picada observando si en los próximos minutos tiene nauseas, malestar general, problemas para respirar o labios hinchados. En el caso de estos síntomas hay que llamar rápidamente al 112 para controlar la reacción, aunque estamos hablando de un porcentaje mínimo de personas a las cuales les pueda afectar de esta manera: El año pasado murieron por este motivo 10 personas en toda España, lo que no supone un número especialmente alarmante.
Hay que tener en cuenta también que hay personas que desarrollan esta alergia grave al cabo de varias picaduras y no reaccionan así con la primera, si no que a veces necesitan hasta 50 picadas posteriores para manifestarla.
Frente a una picadura habréis oído numerosos tratamientos (muchos de ellos "naturales") tales como ajo, o barro con saliva, si bien sobretodo la última no es nada recomendable realmente porque puede acabar en una infección de la herida.
Lo mejor que se puede hacer es primero quitar el aguijón en el caso de que siga clavado y posteriormente aplicarle un poquito de amoniaco o, si no se tiene a mano (que es lo normal), aplicar calor en la zona afectada para destruir cuanto antes las proteínas del veneno y así desnaturalizarlo rápidamente. Una piedra caliente, por ejemplo, nos serviría para ello. Una vez hecho, entonces sí que será recomendable aplicar frío para calmar el dolor de la zona.
En núcleo urbano se puede acudir a una farmacia cercana para que nos den algún tratamiento frente a picaduras.
Como curiosidad, comentaros también que aunque no lo parezca hay varios tipos de avispas y que se pueden diferenciar dependiendo de los colores de la cabeza y del torax y de las franjas negras y amarillas del abdomen. Os pongo una lámina de la web www.biodiversidadvirtual.com en la que veréis perfectamente estas diferencias entre especies.
Si queréis descargaros en grande la lámina podéis hacerlo aquí .
¡Espero que os haya gustado la entrada de hoy! Recordaros que podéis seguirnos en el grupo de Facebook "Entre pinos y sembrados" o a través de la cuenta de Twitter @pinosysembrados.
¡Hasta el Domingo!
Gran variedad de avispas que tenemos y no sabía diferenciar, gracias por el enlace.
ResponderEliminarQue pasa si ya tines 24 hora con la hinchazón, pero fue por que no hiciste nada mas que quitarte el aguijón cuando la avispa te pico.
ResponderEliminarQue deberia de hacer para bajar esa hinchazón?